El Pritzker Architecture Prize 2017 fue presentado por el estudio catalán RCR Arquitectes.
El jurado internacional, bajo la dirección del australiano Glenn Mercutte (ganador de Pritzker en 2002) logró sorprender realmente a la comunidad arquitectónica: en primer lugar, en la historia completa del premio, la unión creativa de varios arquitectos nunca se ha otorgado, y en segundo lugar, las obras de los tres ganadores son poco conocidas, no solo en general. al público, pero también a muchos profesionales.
Por tema: ¿Quién recibirá el Premio Pritzker en 2017?
Rafael Aranda, Carme Pigem y Ramon Vilalta se graduaron de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura del Vallès en Barcelona en 1987. Y ya en 1988, fundaron su propio estudio de arquitectura en la ciudad natal de Olot (en la pronunciación catalana Ulot) en la provincia de Girona y durante los 29 años fuera de Cataluña trabajaron un poco, y luego solo en Francia y Bélgica. La abreviatura en nombre de la oficina, formada a partir de las primeras letras de los nombres de los fundadores, subraya una vez más la ausencia de un líder obvio y la división de responsabilidades en su trabajo. En realidad, por lo tanto, el jurado tuvo que retirarse de las reglas y presentar el primer premio colectivo.
En sus proyectos, los arquitectos catalanes están muy atentos al medio ambiente y al paisaje. Incluso dicen que crean su propio alfabeto cada vez que hablan con un lugar, tratando de hacer de la arquitectura un "conductor de la belleza". A menudo utilizan materiales reciclados, principalmente plástico y acero. Y, por regla general, solo un material domina activamente, como los arquitectos, en sus propias palabras, intentan lograr el máximo impacto con un mínimo de medios.
Espacio público Teatro La Lira, 2011, Ripoll, Girona, España. En colaboración con J. Puigcorbé. Restaurante Les Cols Marquee 2011 Olot, Girona, España. Restaurante Les Cols Marquee 2011 Olot, Girona, España. Restaurante Les Cols Marquee 2011 Olot, Girona, España.Pero en una decisión tan inesperada, el jurado contiene otra declaración importante: el apoyo a la individualidad y las tradiciones locales, un intento de demostrar que para el éxito global no es necesario seguir las demandas de la creciente globalización y universalización, es posible y necesario preservar y preservar sus raíces. Al menos en arquitectura.
La ceremonia oficial de premiación se llevará a cabo el 20 de mayo en Tokio en el Palacio Akasaka.
Rafael Aranda, Carme Pigem y Ramon Vilalta.