Motivos orientales, colores modernos y clásicos tradicionales de la villa del artista Jacques Majorelle, reconstruidos por los actuales propietarios Yves Saint Laurent y Pierre Berger.

Pasando la galeria

Materiales de - (c) Philippe Saharoff

Traducción: Alexander Merzlikin

Diario: N5 (61) 2002

La villa, una verdadera obra maestra arquitectónica, fue construida en 1924 por el artista Jacques Majarel. Después de lo cual fue rescatada por Pierre Berger y Yves Saint Laurent. La restauración fue realmente inspirada: sus autores, Bill Willis, decorador estadounidense, que vive en Marrakech, y el famoso maestro parisino de su oficio, Jacques Grange Como resultado de la reconstrucción, el antiguo edificio adquirió un exquisito sabor oriental. Yves Saint Laurent y Pierre Berger querían preservar el estado de ánimo original que el artista trajo una vez a esta casa. Por lo tanto, la villa resultó ser moderna y clásica tradicional. La casa, oculta en medio del enorme "Jardín Majorelle", la mayoría de los cuales es accesible al público en general y está abierto al público todos los días, tiene una apariencia muy simple: el edificio tiene paredes gruesas, pequeños agujeros, como es habitual en Marruecos, para proteger contra sofocante calor de verano. El restaurador Jacques Majorelle eligió los colores blanco nieve y pistacho verdoso para la fachada. Friso y arabescos fueron creados de acuerdo con los dibujos del antiguo propietario, un artista inspirado en las obras de los artesanos marroquíes y los motivos populares de Cachemira. Después de la muerte del artista, la casa permaneció abandonada durante mucho tiempo, hasta que finalmente los actuales propietarios la adquirieron. Después de la reconstrucción, se conoció como la "Villa Oasis". El edificio separa el jardín botánico del antiguo taller del artista; ahora hay un museo de arte islámico, que está siempre abierto para los visitantes. El brillante modisto Yves Saint-Laurent se convirtió en un digno heredero para el talentoso artista. Increíbles trabajos de restauración, al tiempo que se conservan intactos todos los motivos orientales, ambos propietarios son apasionados coleccionistas. En cada habitación, los huéspedes se sorprenden con los muebles e incrustaciones sirios. madre perla, muebles de estilo art déco, preciosos cristales de ópalo, bronce del siglo XIX, alfombras persas, marcos de ventanas marroquíes.A pesar de la abundancia de muebles y adornos, la riqueza y sofisticación de los adornos, cada habitación mantiene su propia armonía de color. en la casa a través de una pequeña puerta con un dintel bajo, como es habitual entre los marroquíes. Dentro del viajero "se encuentra" una pequeña fuente: las corrientes frescas en medio de un día caluroso son la mejor manifestación de hospitalidad. Es lógico que todo lo demás, como una continuación del tema de la "fuente", se sostenga en tonos azules. El frente en la casa de Yves Saint Laurent está decorado con una combinación de rojo y oro. Esta habitación (cuya decoración no corresponde a su modesto propósito) se denomina "sala de estar de Pierre Loti". La sala de estar y el área de recepción, realizadas principalmente en la gama verde y ocre, están ubicadas en un interior clásico. El siguiente es un comedor magníficamente decorado. Un poco lejos de la casa hay un cenador cuadrado con exactamente el mismo techo piramidal que la casa. Parece que "se desplaza" sobre los árboles, como un flotador en el centro de la piscina. Solo se puede adivinar cuántos bocetos nacieron en este rincón mágico. Sí, la casa lleva merecidamente su nombre: "Oasis". Esta es la casa que más ama al famoso modisto, un refugio, dijo, desde el mundo exterior, al que regresa una y otra vez para descansar del ritmo frenético del mundo de la moda francesa.